lunes, 10 de enero de 2011

Alto al fuego "permanente, general y verificable"

La banda terrorista ETA ha emitido hoy su último comunicado. En él han defendido su "compromiso firme con un proceso de solución definitivo y con el final de la confrontación armada", al tiempo que han exigido que se resuelvan "las claves de la territorialidad y el derecho de autodeterminación".

Pies de plomo. Desilusión y esperanza a medias tintas. Las valoraciones no han tardado en llegar. Desde el Ejecutivo, Alfredo Pérez Rubalcaba ha subrayado que "ETA sigue pretendiendo que el fin de la democracia tenga precio". María Dolores de Cospedal, por su parte, ha denunciado que "es una pausa, no una renuncia". Desde Batasuna han tildado el comunicado de "decisión sin precedentes", mientras que el presidente del gobierno, Jose Luís Rodríguez Zapatero, ha asegurado que "no desde el Gobierno no se va a bajar la guardia". Las víctimas, divididas. Unas han mostrado su esperanza y otras han lamentado que se trate de "una burla, porque es siempre igual".

¿Qué reacción podemos esperar después de la desilusión de todas las treguas anteriores que acabaron con la esperanza de un país entero y, lo peor de todo, con la muerte de nuevas víctimas? En el periódico El País ha destacado como novedad el carácter "general y verificable por la comunidad internacional", así como el "compromiso firme" del que hace gala la banda terrorista en su comunicado.

Pero, ¿estos términos son suficientes? En distintas tertulias vespertinas en las ondas españolas podíamos escuchar a periodistas y políticos hablar de la soberbia con la que los tres jóvenes etarras han leído el comunicado. Pero pensándolo bien, ¿cómo va a reaccionar una banda que solamente entiende la violencia y la extorsión como clave de su existencia en el último medio siglo? ¿Cómo esperamos que reaccionen?

La hija de Ernest Lluch, víctima directa de estas personas indeseables que han sembrado el terror y el horror en su familia, ha pedido que no se utilicen términos como victoria o derrota. Si se quiere concluir con ETA habrá que dotarle de los mecanismos necesarios para que desaparezca de una vez por todas, porque lo que está claro es que España no necesita un alto al fuego, sino la desaparición real de esta banda.

Para ello tendremos que trabajar todos y todas a la par. Las víctimas y el pueblo vasco tienen un papel fundamental, junto a la clase política que, al menos en el País Vasco han sabido anteponer los intereses generales a los intereses propios. Puede que sea una utopía o puede ser el comienzo del fin.

¿Puede que esta tregua sea para colarse en las listas electorales? La izquierda abertzale podrá participar siempre y cuando estén desligados de la banda y denuncien la violencia como vía para conseguir sus objetivos, como lo establece la ley.

¿Un buen comienzo? La entrega de armas, sin lugar a dudas. ¿Podemos confiar en que esta tregua sea la definitiva? Bueno, es muy complicado pero ¿por qué no? En Irlanda también llegó el día pero, eso sí, sin permitir que se vuelvan a rearmar y manteniendo la política antiterrorista actual, junto a la colaboración del país galo, hasta que ETA desaparezca. Ojalá sea por vía pacífica a raíz de esta tregua.

Absurda Cenicienta

2 comentarios:

  1. Ojalá sea cierto, esperanzas claro que hay, pero como dices, con pies de plomo. Yo vivo en Euskadi aunque no soy de aquí, y te puedo asegurar que aquí la noticia se vive de verdad, la gente necesita creer...
    Me gusta como escribes.

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  2. Muchas gracias por tu comentario.
    Ojalá sea más que una creencia porque este anuncio se convierta en una realidad.
    Mucho ánimo y estás bienvenida a seguir leyendo las próximas entradas.

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